Un acto de manifestación de una postura llevó a ultrajar el resultado de una acción colectiva que no es precisamente el tema en debate. Nuevamente quedó demostrado que la principal línea ideológica en discusión, en cierto sectores sociales es odio manifiesto a través de las acciones.
Durante el fin de semana pasado se concretó, en el Centro Cívico Barilochense, otra muestra de la barbarie que se utiliza para combatir las ideas. Sin embargo, casi en forma simultánea, mientras pocas organizaciones, un grupo de jóvenes empezaron el trabajo que finalizará con la restauración.
Los mismos rastros de la intolerancia en que se ve sumergida nuestra ciudad también se ven, casi a diario, en las pantallas de un par de canales de tv de Buenos Aires. Basta con haber visto lo coincidente de las declaraciones de la ex ministra macrista, Patricia Bullrich, con el hecho acaecido durante el fin de semana en Bariloche.
Estas declaraciones no están alejadas de la permanente injerencia de cuando estuvieron a cargo del gobierno nacional y, hoy desde una crítica permanente al gobiernos de Alberto Fernández. Opiniones que siempre aportan a la división de nuestra comunidad.
Esta actitud está muy cercana a la muestra de odio y racismo que se manifestó, tan solo tres semanas antes en el mismo lugar, el Centro Cívico de Bariloche.
Finalmente, un grupo de jóvenes, que desde es el mismo comienzo de la pandemia se vienen expresando solidariamente con acciones, en una actitud sumamente constructiva expresan su rechazo trabajando y convocando para comenzar los trabajos de restauración. En principio organizaron un grupo de Whatsapp llamado «Repintada Plaza Pañuelos«, cuyo fin es el que se indica en el nombre. Lo digno de rescatar es que nunca se incluyen críticas ni reproches a lo hecho por los intolerantes, sino como se organizan para rehacer la obra de memoria en Bariloche.
Es así que finalmente la organización está en marcha. Pueden llegar a convocarse cientos de ciudadanos Barilochenses el próximo sábado desde la mañana. Después de la barbarie jóvenes barilochenses iniciarán el trabajo de restauración de los pañuelos de las Madres de los 30.000 desaparecidos.
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Un comentario
Sería bueno que la plaza sea de todos los Argentinos, y no solo de los que quieren un color en especial de pañuelo.
Termina siendo de unos pocos.