La reforma laboral vuelve a unir a las centrales obreras en Bariloche, al menos frente a un rechazo común al proyecto impulsado por el gobierno nacional. Así quedó expuesto en una extensa conferencia de prensa que fue cubierta y transmitida en vivo y en directo por Comenzando La Mañana de Bariloche En Redes, con la participación de referentes de la CGT, la CTA de los Trabajadores y la CTA Autónoma, junto a sindicatos como UnTER, ATE, SOYEM y UTHGRA, entre otros.
El anuncio formal fue la movilización prevista para el jueves 18, a las 17.30, con concentración en Onelli y Moreno y marcha hacia el Centro Cívico. Sin embargo, el contenido del encuentro fue más amplio. Las exposiciones dejaron en claro que el rechazo no se limita a una medida puntual, sino que apunta a lo que consideran una reconfiguración profunda del sistema laboral y del rol de las organizaciones sindicales.
Luis Gianfrini, referente de la CGT, explicó que la convocatoria responde a una resolución nacional que alcanza a todas las regionales del país. “El motivo de esta marcha es una medida de fuerza contra la reforma laboral que quiere implementar el gobierno con una urgencia bastante extraña”, sostuvo. También señaló que la intención es informar y convocar no solo a los trabajadores, sino a toda la comunidad.
Desde la CTA de los Trabajadores, Jorge Molina amplió el alcance del mensaje. Remarcó que la reforma apunta a debilitar a los sindicatos y a profundizar el ajuste sobre la clase trabajadora. “No estamos en contra de una reforma laboral, estamos en contra de una reforma que recorte derechos”, afirmó, y planteó la necesidad de un debate distinto, orientado a ampliar derechos e incluir a quienes hoy están fuera del sistema formal.
La reforma laboral vuelve a unir, pero expone tensiones internas
Durante la conferencia también quedaron expuestas diferencias sobre la forma de enfrentar el avance del proyecto. Desde UnTER y ATE se planteó que la respuesta debería incluir un paro general. En contraste, la CGT aclaró que a nivel local no hubo una propuesta formal en ese sentido y que la regional acata lo definido por la conducción nacional.
Gianfrini fue directo al respecto: “Somos una delegación regional y eso lo determina la conducción nacional”. Reconoció el debate interno, pero sostuvo que la movilización marca el inicio de un proceso de lucha que podría escalar según cómo evolucionen los acontecimientos.
La intervención más detallada sobre el contenido de la reforma llegó desde la CTA Autónoma, a través de Luis Urra. Enumeró cuatro ejes que, según explicó, atraviesan el proyecto oficial: la negociación individual frente al empleador, el debilitamiento del salario real, el desfinanciamiento de los sindicatos y las restricciones al acceso a la justicia laboral. “Todo esto lleva a una precarización mucho más grave de la que ya existe”, advirtió.
Cuestionamientos políticos y advertencias
El encuentro también tuvo un fuerte tono político. Se reclamó a legisladores nacionales por Río Negro que expliciten cómo votarán cuando la reforma llegue al Congreso y se cuestionó el posicionamiento de representantes de La Libertad Avanza y del PRO. Hubo además críticas al gobernador Alberto Weretilneck, señalado por algunos referentes como funcional a las políticas nacionales.
En ese contexto, los oradores coincidieron en que la movilización del jueves es solo el primer paso. “Esto recién empieza”, repitieron, y dejaron abierta la posibilidad de nuevas medidas si el proyecto avanza.
La reforma laboral vuelve a unir a las centrales obreras en una imagen poco habitual en Bariloche, amplificada por su transmisión en vivo. La incógnita sigue siendo si esa unidad logrará sostenerse cuando el debate pase de la calle a decisiones concretas y el conflicto ingrese en una etapa más dura.
