El presupuesto 2026 INVAP fue el eje de una reunión entre la senadora justicialista Ana Marks, la diputada nacional Adriana Serquis y autoridades de la empresa estatal de tecnología, en la que se analizó el impacto que tendría el proyecto presupuestario impulsado por el Gobierno nacional sobre el sistema científico y tecnológico argentino.
Durante el encuentro, del que participó el Subgerente General Operativo de INVAP, Gabriel Absi, se expuso el escenario de desfinanciamiento previsto para la Comisión Nacional de Energía Atómica. A partir de ese análisis, las legisladoras manifestaron su preocupación por el riesgo que corren proyectos estratégicos que actualmente se encuentran en ejecución y cuya continuidad depende directamente de la asignación de recursos prevista para el próximo año.
Desde INVAP se planteó la necesidad de garantizar el financiamiento de tres desarrollos clave que se llevan adelante junto a la CONAE: SABIA-Mar, SAOCOM y SARE. Se trata de iniciativas de alto valor estratégico para el país, vinculadas a la observación satelital, la investigación científica y el desarrollo tecnológico, que ya se encuentran en marcha y que podrían verse seriamente comprometidas si no se incrementa la partida presupuestaria correspondiente.
Ana Marks sostuvo que existe plena conciencia sobre la importancia de sostener estos proyectos y cuestionó el rumbo del presupuesto presentado por el Gobierno nacional. Señaló que la ciencia y la tecnología no pueden quedar a mitad de camino por decisiones presupuestarias y remarcó que el ajuste previsto deja en evidencia una definición política que afecta directamente al desarrollo científico del país. En ese sentido, anticipó que estas discusiones deberán darse en el ámbito del Congreso.
El presupuesto 2026 INVAP y el debate en el Congreso
En la misma línea, Adriana Serquis reafirmó el compromiso de impulsar las gestiones legislativas necesarias para lograr una ampliación del presupuesto de la CONAE. Subrayó que la inversión en ciencia y tecnología debe ser considerada una política de Estado indispensable para el desarrollo soberano y federal de la Argentina, y advirtió que la falta de financiamiento impacta no solo en los proyectos, sino también en el trabajo calificado y en la capacidad de planificación a largo plazo.
Durante la reunión también se abordaron otros temas relevantes para el funcionamiento de INVAP. Entre ellos, la situación de las exenciones para importaciones, un aspecto clave para evitar demoras y sobrecostos en proyectos de alta complejidad tecnológica. En ese marco, las legisladoras expresaron su acompañamiento al tratamiento legislativo correspondiente y coincidieron en la necesidad de retomar un proyecto de ley específico que contemple exenciones tanto para importaciones como para exportaciones.
Según se señaló, contar con un marco normativo estable permitiría brindar previsibilidad a la empresa y evitar que estas discusiones deban repetirse cada año en el marco del debate presupuestario. Finalmente, Marks destacó que defender a INVAP implica defender el trabajo argentino, la soberanía tecnológica y la capacidad del Estado de planificar políticas públicas estratégicas a largo plazo, y remarcó la importancia de construir consensos que garanticen la continuidad de los proyectos en ejecución.
