El licenciamiento de Sergio Herrero se formalizó cuando el intendente Walter Cortés informó que el secretario de Turismo debía atravesar una cirugía de alta complejidad. Detalló que se trataba de “una operación bastante delicada”, que incluía “poner una rodilla” y “arreglar también la cadera”, y que la recuperación demandaría “un tiempo de la rehabilitación”. Según explicó, la situación impedía que Herrero continuara en funciones y era necesario actuar sin demoras. “No podemos dejar el EMPROTUR acéfalo”, afirmó.
Cortés designó de inmediato a Eric Guzmán como secretario de Turismo mientras dure la licencia. Remarcó que “es una persona que sabe de turismo” y que su incorporación garantizará continuidad en vísperas de la temporada alta. Destacó además que el trabajo previsto se mantendrá sin modificaciones: “Todo se va a hacer como se venía planeando”. Aunque la salida respondió a cuestiones médicas, el intendente expresó un matiz personal: “Espero que le vaya bien porque es un amigo”.
Festejaron la salida de Herrero y el clima previo quedó expuesto
Justamente, momentos antes del anuncio oficial, el concejal Facundo Villalba había descrito en “Comenzando La Mañana” un escenario difícil en el EMPROTUR durante la gestión del secretario. Afirmó que el ente atravesaba “una situación de muy grande degradación a nivel institucional” y que el funcionario “no habla con el sector privado por lo menos de Bariloche”. Sostuvo que distintas cámaras empresariales denunciaban falta de diálogo, algo que consideraba grave para la planificación turística.
Villalba también relató que se habían producido “situaciones muy complejas, hasta de violencia verbal en la mesa del EMPROTUR”, con episodios que, según quienes integran el organismo desde hace años, “era algo que no pasaba”. Mencionó insultos en reuniones y discusiones por temas menores, lo que había erosionado la dinámica interna del ente. Además, advirtió que hacía más de cuatro meses no lograban designar un director ejecutivo titular: “Todavía no se puede poner de acuerdo la mesa para nombrarlo”. Señaló que esa situación “es muy cómoda para el secretario de Turismo”, quien ejercía la presidencia sin un contrapeso técnico.
Cuando se conoció la licencia de Herrero, miembros del organismo confirmaron que la directora interina, Natacha Vázquez, lo eliminó de inmediato del grupo institucional de mensajería y agregó en su lugar a Guzmán. Otro de los mensajes, llegados a «Bariloche En Redes», relató «en el momento en que se divulgo la salida de Herrero, en el EMPROTUR abrieron un Chandon Moet del año 87 qué tenían guardado para esa ocasión en particular«. Ambos gestos evidenciaron que el desgaste venía de antes y que la salida del funcionario cerraba una etapa marcada por tensión interna.
Un nuevo equilibrio institucional y la normalización del ente
La designación de Guzmán restableció automáticamente el orden institucional previsto: el secretario de Turismo asume la presidencia del EMPROTUR y representa al Ejecutivo en la mesa directiva. Aunque el cambio se originó en una necesidad sanitaria, la transición alivió un clima que ya había sido señalado por actores internos y externos. Con la conducción normalizada, el desafío inmediato será recomponer vínculos, mejorar el funcionamiento técnico y asegurar la coordinación con el sector privado en un momento clave para la ciudad.
