Empujan al pluriempleo docente los ajustes y salarios licuados que, según denunciaron dirigentes de UnTER, vienen deteriorando de manera sostenida las condiciones de vida de los trabajadores de la educación en Río Negro. El planteo fue realizado durante una entrevista en el programa de radio y streaming Comenzando La Mañana, con la participación de Norma Pérez, flamante secretaria general de la Seccional Bariloche, y Florencia Anfuso, delegada de Salud de la Zona Andina.
La declaración de ambas dirigentes fue categórica al describir el escenario salarial que atraviesa la docencia. Aseguraron que los ingresos se agotan prácticamente el mismo día del cobro y que el nivel de endeudamiento se volvió estructural. En ese contexto, afirmó que cada vez más docentes se ven obligados a buscar otros trabajos para sostener a sus familias.
Según detalló Norma Pérez, el pluriempleo dejó de ser una situación excepcional y se convirtió en una realidad cotidiana. Docentes que trabajan como choferes de aplicaciones, venden comida, cuidan personas, dan clases particulares o realizan tareas informales forman parte de un cuadro que, remarcó, no responde a decisiones personales sino a una necesidad urgente de subsistencia.
Pérez también advirtió sobre el agotamiento físico y mental que atraviesa el sector. Señaló que la sobrecarga laboral, sumada a la incertidumbre económica y a la presión cotidiana, está generando un desgaste profundo que impacta tanto en la vida personal como en el funcionamiento de las escuelas.
Empujan al pluriempleo docente como resultado del ajuste
En ese mismo marco, Florencia Anfuso explicó que la crisis sanitaria que atraviesan los afiliados al gremio debe leerse como una consecuencia directa del ajuste general. Denunció interrupciones reiteradas en la atención médica, suspensión de cirugías programadas y de urgencia, y dificultades para acceder a medicamentos, incluyendo la suspensión de descuentos en farmacias en distintos puntos de la provincia.
Anfuso sostuvo que estas situaciones agravan un escenario ya crítico, ya que afectan a trabajadores cuyos salarios se encuentran fuertemente deteriorados. Remarcó que en algunas localidades los docentes deben trasladarse a otras ciudades para recibir atención médica, afrontando costos adicionales que no están en condiciones de asumir.
Ambas dirigentes coincidieron en que este panorama explica el malestar creciente en las escuelas y las dificultades para sostener la organización gremial en un contexto de cansancio generalizado. En ese sentido, vincularon la movilización prevista para el día 18 con el rechazo a las políticas de ajuste y al avance de reformas que, advirtieron, ponen en riesgo derechos laborales conquistados.
Desde UnTER plantearon que la nueva etapa de conducción provincial, asumida el 10 de diciembre, busca expresar con mayor firmeza este cuadro de situación y articular respuestas colectivas frente a un modelo que, según denunciaron, profundiza la precarización del trabajo docente en toda la provincia.
