Una noche cualquiera terminó en agresión
Agredido por policías en la vía pública sin causa ni advertencia. Así lo relató Matías Pacheco, el joven que fue entrevistado en vivo por Comenzando la Mañana de Bariloche En Redes tras la viralización del video en el que se ve cómo lo golpean frente a la Subcomisaría 55 del kilómetro 13.
“Fue horrible lo que viví esa noche”, dijo visiblemente conmovido en la transmisión en vivo, a una semana del hecho. “El que tiene que cuidarnos, nos maltrata, nos agrede”, agregó al iniciar su testimonio.
Matías volvía de jugar un partido en la liga local cuando, junto a su cuñado y un amigo, se detuvieron un momento en la esquina de Río Follel y la Paralela Agustillo. “Estábamos parados esperando un Uber o viendo si entrábamos caminando al barrio. No estábamos haciendo nada”, explicó. En ese momento, una patrulla policial se detuvo detrás de ellos y, sin ningún pedido de identificación ni diálogo previo, tres efectivos descendieron “violentos, a amedrentarnos”.
“Me pegó en el pecho y me tiró gas en la cara”
Consultado por el inicio de la agresión, Matías fue claro: “Yo intentaba razonar, decirles que no queríamos tener quilombo con ellos. Uno me empezó a pegar piñas en el pecho. Le decía que no me falte el respeto, que no estaba haciendo nada”. Durante la entrevista en el streaming se le consultó si los agentes tenían identificación, respondió que solo uno llevaba visible su nombre.
Luego del primer ataque, Matías intentó cruzar hacia la comisaría para denunciar lo sucedido. “Cuando estoy entrando, el mismo policía que me pegó venía corriendo atrás mío. Le digo a la chica que estaba ahí que quería hacer una denuncia y me sacan a los empujones. Ahí me tiraron gas pimienta en la cara”, relató.
“El video empieza cuando yo ya estoy todo gaseado”, aclaró. “Se me ve así, con la cara tapada, porque no podía abrir los ojos. Tenía gas en la boca, en los ojos, en toda la cara. Fue una tortura.”
La denuncia del joven agredido por policías que no quisieron tomar
Matías aseguró que en la propia subcomisaría le negaron tomar la denuncia. “No me la quisieron tomar, me sacaron a los golpes”, explicó. Finalmente, fue una mujer, madre de un amigo, quien logró que se dejara asentado lo ocurrido.
En medio de la feria judicial, Matías se acercó a Fiscalía y confirmó que ya había iniciado el trámite. “Estoy esperando que me llamen. Me dijeron que todavía no habían tocado los papeles”, contó. También denunció que en el hospital público no le constataron las lesiones. “Me dijeron que no tenía nada, pero yo tenía toda la cara hinchada y me ardía”, dijo.
“No me siento seguro”
La entrevista, realizada vía streaming, mostró a un Matías todavía visiblemente afectado. “Ayer estuve en el centro y evité pasar cerca de policías. Ya no me siento seguro”, aseguró. También recordó que durante el ataque su cuñado intentó intervenir y también fue agredido.
Un dato que indigna aún más: mientras sucedía la agresión, otro vecino denunciaba que le estaban tomando la casa en un barrio cercano, pero no recibió asistencia policial. “Le dijeron que iban a mandar una patrulla y no llegó nadie. Porque el patrullero estaba ocupado… pegándonos a nosotros”, resumió Matías.
“Gracias a Dios no me detuvieron, me tiraron en la calle”
“Podrían haberme detenido sin causa. Pero no. Me largaron en la calle, gaseado, sin poder ver. Como pude, llegué a una remisería y me lavé la cara con agua fría. No podía respirar, me ardía todo”, relató.
Sobre el final de la entrevista, agradeció el espacio brindado y explicó por qué decidió hablar: “En los comentarios de los videos dicen cualquier cosa, opinan sin saber. Yo necesitaba contar lo que realmente pasó. Y esto que se ve en el video es solo una parte”.
