La Triple Alianza y el funeral político que Weretilneck no ve

Lo que ocurre hoy en Río Negro dejó de ser un simple reacomodamiento político: es el derrumbe lento y ruidoso de un ciclo que ya no puede sostenerse. Las alianzas inesperadas avanzan con precisión mientras el oficialismo se hunde en su propia inercia y un gobernador parece empeñado en no mirar el abismo que se abre a sus pies. Todo indica que la etapa que conocimos está agonizando, aunque algunos todavía finjan no escuchar el silencio que deja atrás.